domingo, 25 de julio de 2010

Identifican un locus vinculado a riesgo de linfoma folicular

Algunas variantes genéticas ubicadas en el locus 6p21.32 se asocian con una mayor susceptibilidad para desarrollar linfoma folicular, según se desprende de los resultados de un estudio internacional que se publica hoy en Nature Genetics, en el que han participado investigadores del Instituto Catalán de Oncología (ICO), en el marco de su colaboración en el Consorcio InterLymph.


El trabajo, que ha consistido en el desarrollo de diversos estudios de asociación de los diferentes subtipos de linfomas no Hodgkin, también ha encontrado evidencias que confirman la asociación entre otras regiones cromosómicas y el riesgo de desarrollar leucemia linfocítica crónica y el linfoma linfocítico de células pequeñas, por ejemplo algunas variantes en rs735665.

Los científicos detectaron un polimorfismo mononucleotídico vinculado con el riesgo de desarrollar linfoma folicular en la región del cromosoma 6, especialmente concentrado en torno a dos picos independientes en los locus 6p21.33 y 6p21.32. La señal de mayor intensidad de 6p21.33 se ubicó en la región PSORS1, que se sabe que codifica predisposición a la psoriasis, donde este mismo grupo de investigación había detectado un locus de susceptibilidad al linfoma folicular.

En esta nueva investigación se ha hecho un genotipado individual y se ha comparado el genoma de 1.465 pacientes afectados por linfoma no Hodgkin con el análisis de cerca de 7.000 controles no afectados por estas patologías y han podido identificar subgrupos de interés en tres etapas.

Sílvia de Sanjosé, jefa de la Unidad de Infecciones y Cáncer del ICO, ha explicado a Diario Médico que estos resultados aportan datos de gran interés, ya que validan algunas hipótesis efectuadas a partir de observaciones previas, ahora en un grupo poblacional mucho mayor. Además, los datos se han confirmado en series independientes de pacientes, lo que resulta más significativo.

A su juicio, estos hallazgos permiten entender mejor el proceso asociado a los diferentes tipos de linfomas no Hodking, lo que facilitará la investigación orientada a desarrollar nuevas herramientas terapéuticas dirigidas contra dianas específicas, además de que refuerzan el papel de la etiología genética de estas enfermedades.

En la red de trabajo de InterLymph participan 110 equipos de investigación de diferentes países y el grupo que dirige Sanjosé en el ICO se centra sobre todo en la leucemia linfática crónica.

Cáncer: riesgos de la mamografía y la citología

Hacerse la mamografía desde los 45 años y repetir la citología cada año no sería del todo aconsejable. En este instante muchos de nosotros tenemos tumores malignos, creciendo tan lentamente que nunca nos enteraremos que tenemos cáncer. Por eso los miembros de la Fuerza Preventiva de EE.UU. actualizaron las recomendaciones para mamografías y citologías.


La aparición de nuevos exámenes para la detección más temprana del cáncer ha permitido encontrar tumores muy pequeños. Sorpresivamente estos exámenes no han salvado vidas y para algunas mujeres pueden ser más los riesgos que los beneficios.

Cáncer de mama: Mamografía

Recientemente la recomendación de empezar las mamografías a los 40 años se ha retrasado hasta los 50 y en vez de realizarla anualmente, es preferible sólo cada 2 años. Adicionalmente se le pidió a los médicos no enseñarle a sus pacientes el auto-examen de mama.
Lamentablemente son frecuentes los sustos que llevan a biopsias y peor aún a tratamientos innecesarios. La mamografía puede detectar tumores de crecimiento lento que no causarían ningún problema, aún sin tratamiento. Estos tumores inofensivos son tratados como si fueran letales debido a que lucen igual a los mortales en la mamografía.

Cáncer de cuello uterino: Citología
Para las mujeres entre 21 y 30 años, la citología cada 2 años en vez de anualmente es la nueva recomendación. En mujeres jóvenes son frecuentes las lesiones de apariencia precancerosas pero que desaparecen solas sin tratamiento. Cuando la citología encuentra estas lesiones, el ginecólogo las remueve con procedimientos que pueden dañar el cuello uterino y causar problemas al quedar embarazada como: parto prematuro y necesidad de cesárea.

Las mujeres mayores de 30 con tres citologías normales pueden repetirlas cada 3 años. Aquellas mayores de 65 o con histerectomía, que tengan tres citologías normales pueden dejar de hacerse el examen completamente

Pregorexia o anorexia en el embarazo

En la actualidad hay una tendencia peligrosa que se está propagando en mujeres embarazadas, afectando no sólo a la mamá sino al bebé. Hablamos de la pregorexia, es decir, la anorexia en mujeres embarazadas. Algo que hasta hace poco no ocurría, intentar bajar de peso y estar delgadas en el periodo de gestación.


Muchas mujeres se preocupan en exceso por no engordar, sin exceptuar el embarazo, cuando los doctores afirman que en la mayoría de las embarazadas el aumento de peso está justificado tomando en cuenta que el bebé, la placenta, y todos los fluidos tienen ya por sí solos un peso extra.

La mujer promedio, en su peso normal, puede aumentar entre 19 y 26 libras (9 y 12 kilos) durante el embarazo. Las únicas excepciones son mujeres con sobrepeso en las cuales el aumento debe ser menor y las mujeres por debajo de su peso donde el aumento puede ser mayor de lo recomendado para tener un embarazo sano. El problema surge cuando las mujeres embarazadas quieren y desean verse delgadas.

¿Quién ha provocado esta enfermedad? Los medios que invitan a una figura delgada, la moda representada por figuras esqueléticas, incluso las embarazadas famosas que hacen hasta lo imposible para mantenerse delgadas durante los 9 meses de gestación, y no sólo eso, regresan a su figura esbelta rápidamente tras el parto.

¿Cuál es la solución? No olvidar que para que un embarazo sea saludable y no perjudique al bebé la muejres se debe alimentar correctamente para nutrir sin carencias a dos cuerpos. Asimismo, la práctica de actividad física regular y controlada durante la gestación puede ayudar a mantener la figura y beneficiar el desarrollo del bebé.

Las mujeres deben estar conscientes de que embarazarse requiere de cambios en la vida incluida la alimentación. Contar con todos los nutrientes en el cuerpo previene partos prematuros o deficiencia de calcio en las madres, elemento absorbido por los bebes en grandes cantidades. Además un peso saludable no se logra dejando de comer sino ingiriendo todos los alimentos de manera balanceada.


http://www.diariosalud.net/content/view/20254/36/